Tengo una especie de gripa en el corazón
Lo vi, me enamoré, tuve miedo y dudé.
Dudé poco, lo disfruté al máximo.
Lo quiero, lo respiro,
me llena, me complementa,
me cuida, me hace correr,
me hace gritar y, en ocasiones, volar.
Hoy... sólo siento gripa en el corazón.